Vender un inmueble es una operación que, entre otros sentimientos, puede generar un cierto miedo y mucha incertidumbre.
Si en este momento pasas por algo similar, es posible que te preguntes cosas como ¿qué sucede si no logras vender la casa? ¿Venderás al precio correcto? ¿Cuánto tiempo tardarás en hacerlo?
El miedo al vender una casa es muy común y no debes avergonzarte de ello, ya que es una sensación totalmente justificada. Además, suele estar alimentado por diversas dudas.
Cuando pones en venta tu casa tienes contacto con personas que quiere aprovechar el negocio de la manera que sea posible. La noticia buena es que puedes prepararte para estas situaciones.
¿Qué miedos pueden acudir a tu mente al vender una casa?
Vamos a ver algunos de los miedos más habituales que nos transmiten los propietarios. Y así poder evitar que tú los vivas igualmente.
Vender a un precio muy bajo
Muchos compradores tienen medio de pagar un precio más alto de lo que dictamina el mercado en el momento de la operación. Y en el caso del vendedor la sensación es similar.
En este caso, temen perder la oportunidad de ganar un capital mayor con la operación. Es decir, equivocarse con el precio y vender más barato de lo que el mercado puede asumir.
Este tipo de miedos aumentan a medida que la venta avanza, es decir, a los pocos días de publicarse. O, por el contrario, temen haber puesto un precio excesivo y podrían bajarlo por iniciativa propia según pasan los días. A veces, sin que nadie llegue a hacer una oferta en firme.
Muchas visitas y pocas ofertas
Es habitual que como propietario te preguntes cuánto tiempo tardarás en vender tu inmueble. Además, podrías sentir más nervios al saber que las únicas ofertas recibidas están por debajo del precio esperado.
Aunque hayas preparado una presentación de la casa previa para despertar el interés de los compradores, la venta puede retrasarse. Es posible que en el mismo sector exista una oferta parecida que atrae a más personas y a un menor precio.
¿Cómo reacciona el mercado?
Todo propietario teme no saber cómo va a reaccionar el mercado cuando ponga en venta su casa. Ya que es difícil saber si habrá acontecimientos inesperados que puedan motivar el que no haya ninguna oferta por la propiedad. O si no le gustará a nadie o si las reformas no son suficientes.
Este tipo de dudas aparecen siempre tras colocar el anuncio de se vende. Y poco después, cuando las primeras ofertas llegan, este temor desaparece.
El comprador no continúa con la operación
Cuando el propietario del inmueble recibe una oferta y accede, el proceso de compraventa como tal se inicia. Sin embargo, en ocasiones hay problemas que detienen la operación, como cuando el comprador deja de tener trabajo, pasa por problemas financieros o no logra conseguir la financiación deseada.
En estos casos el proceso se detiene y hay que volver a retomar las visitas y los anuncios.
Permitir que entren desconocidos a la casa
Por seguridad, permitir la entrada de desconocidos es un miedo natural al vender un inmueble que la mayoría de los propietarios tienen.
Al fin y al cabo, estás abriendo las puertas al interior de tu casa. Y es normal sentir miedo por si te pueden ocasionar problemas futuros o, sobre todo, por si la casa no cumple sus expectativas.
Para combatir este problema, sube fotos de calidad de cada una de las partes de la casa. Y súbelas en las redes sociales o páginas de ventas de viviendas. Porque la idea es hacer que el lugar luzca atractivo.
Así, los compradores pueden apreciar cada detalle de la vivienda sin la necesidad de asistir presencialmente. Y tener una composición mental más realista.
También, puedes hacer videollamadas en tiempo real para mostrar el lugar a los posibles compradores o hacerles un tour en directo.
Y, lo más importante, si quieres ahorrarte todos estos miedos, lo mejor es delegar la responsabilidad de la venta en profesionales de confianza. Como los que encontrarás en Futurpiso Paiporta. Deja que nos ocupemos de todo y olvídate de las incertidumbres.
